Si bien no ha habido mención de parte de las autoridades de que sea obligatorio hacer deporte con mascarilla, sacamos por sentido común que la actividad deportiva es visiblemente incompatible con el uso de mascarillas. Por qué? En GRAFIA le ayudamos a esclarecer qué es prudente y qué no lo es en cuanto a protección durante las actividades deportivas.

Tenemos por un lado las indicaciones de parte de las autoridades en salud recomendándonos que el uso de mascarilla es aconsejable y obligatorio en muchos casos, inclusive en muchos espacios públicos. Pero por otro lado, tenemos lo riesgoso que puede ser utilizar la mascarilla al hacer ejercicio aeróbico, el cual se caracteriza por aumentar la necesidad de oxígeno del cuerpo. Y es que la mascarilla es un artefacto que obliga a la persona a respirar de vuelta su propio dióxido de carbono, por lo que tiene la tendencia a marear y enfermar transitoriamente a la persona haciendo deporte. De usarla, los expertos aconsejan estar atentos ante posibles síntomas de falta de oxígeno por causa de la mascarilla: mareos, ligera asfixia, entumecimiento o dolor de cabeza. De percibir alguno de estos síntomas, es mejor detenerse o por lo menos quitarse la mascarilla. Todo esto sin hablar de la posible necesidad de estarse tocando la mascarilla para ponérsela y quitársela constantemente, por la misma falta de oxígeno. ¡He ahí un foco potencial de contagio!

Si bien hay momentos en que no hay necesidad de utilizar mascarilla cuando se hace deporte manteniendo la distancia a 2 metros o más, en GRAFIA creemos que se puede estar protegido en todo momento y a la vez sin riesgo de padecer falta de oxígeno. ¿Cómo?

Uso de Careta como Alternativa en el Deporte

Como explicamos anteriormente, la actividad deportiva es bastante incompatible con el uso de mascarillas, sobre todo si la necesidad de oxígeno es exacerbada por dicha actividad. Nosotros en GRAFIA proponemos la feliz alternativa de la careta para quienes quieren estar protegidos y no tener que pensar en estársela quitando ni poniendo.

Pongamos un ejemplo:

Podemos estar trotando, solos y sin problema ya que cualquier otro corredor cercano estaría a más de 4 metros (distancia mínima recomendada por la velocidad a la que va un corredor delante del otro) y decidimos parar en una tiendita de abarrotes para comprar un refresco. Tendríamos que buscar la mascarilla (si no la lleváramos puesta), ponérnosla, comprar el refresco, y quitárnosla para tomarlo (peligro potencial de contagio número uno). Realmente no es prudente usar mascarilla en un escenario como ese. Ahora veamos la careta: NO obstaculiza el paso de oxígeno a los pulmones por lo que se puede llevar puesta durante la actividad. Se puede bajar en la tiendita de abarrotes, comprar el refresco, tocarle el borde inferior para subirla levemente y tomar el refresco, y volverla a bajar soltándola. Sin problemas, sin puntos de potencial contagio, una alternativa muy efectiva.

En GRAFIA estamos para facilitarle la transición a la nueva normalidad que nos trajo la pandemia. Visítenos y vea los productos que le ofrecemos para facilitarle su diario vivir.